El cine de terror (y sus numerosos subgéneros, desde el thriller inquietante hasta el gore) se ha convertido en las últimas décadas en uno de los géneros más rentables de la industria cinematográfica. Hay propuestas brillantes, sí, que crean tensión y desasosiego, pero la mayoría se despachan con un par de sustos y tramas de y para adolescentes subnormales.
Escribo esto tras ver una de estas últimas películas. El sopor que me ha generado me ha hecho reflexionar sobre las películas “de miedo” que realmente me han aterrado de verdad, que me han dificultado dormir tras su visionado. Y descubro que son muy pocas y que algunas que me alteraban cuando era niño me resultan ahora insoportables.
Aquí va una lista con algunas películas de terror en las que un servidor ha pasado miedo de verdad viéndolas de adulto. No incluyo thrillers o dramas que pueden angustiar y hacer pasar un mal rato al espectador (algunas de este tipo en las que lo he pasado mal últimamente han sido Shutter Island o La cinta blanca), sino que me ciño exclusivamente al género puro y duro:
La profecía
Un referente en el género “niño poseído” y en todo el cine de terror (junto a The innocents). El chaval, la cuidadora, el perro, los susurros de la banda sonora,… Aterradora.
El resplandor
La imagen del niño con el triciclo a toda velocidad por los interminables pasillos del hotel forma ya parte de los miedos profundos de al menos un par de generaciones.
La semilla del diablo
Polanski filmó una atmósfera y un martirio brutal para una madre en el que nos embarcó a todos. La última parte de la película es de lo más acongojante que uno ha visto.
Paranormal activity
El género "falsa realidad" como fenómeno de masas nació a finales de los noventa con la discretita El proyecto de la bruja de Blair y se encuentra ahora en pleno apogeo con multitud de propuestas taquilleras, como Monstruoso o la española Rec. Paranormal activity sigue al pie de la letra las reglas de este tipo de cine. Es simple y vacía, sí, pero cuando la pareja se acuesta y el reloj de la videocámara comienza a avanzar, uno no sabe dónde meterse.
The innocents
En España se la bautizó como “Suspense” (a todo esto, cómo se lo debían pasar hace medio siglo los que ponían los títulos que les daba la gana a las películas extranjeras). Auténtica joya del cine de miedo. Niños y fantasma aterradores en un viejo y gélido caserón.
The ring
Me refiero a la original japonesa. Aunque en un segundo visionado, me pareció aburrida y le vi las costuras por todos los lados, nunca olvidaré la primera vez que vi la escena final y la desconfianza con la que miré al televisor durante unos días.
Funny games
Me refiero a la original, aunque me han dicho que el remake es idéntico (a todo esto, ¿ha dado Haneke una explicación convincente de por qué se prestó a volver a rodar la misma película para los norteamericanos?). Bien es cierto que esta obra es más bien un ejercicio de estilo moralizante sobre la violencia y este tipo de "entretenimiento" cinematográfico, con caricaturas en vez de personajes malvados, y con apelaciones a la inteligencia del espectador sobre la catadura de lo que está viendo o disfrutando. Pero, más allá de las lecciones del director austriaco, el mal rato que pasa uno es de órdago.